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31 Marzo 2018

‘Peix sec’, un manjar heredado de la necesidad de Formentera

‘Peix sec’, un manjar heredado de la necesidad de Formentera

Las gastronomía de todos los lugares del planeta ha evolucionado siempre sobre los mismos ingredientes. La materia prima propia de la zona y sus posibilidades de aprovechamiento han sido siempre las claves, ya que el autoabastecimiento es durante las épocas de necesidad la mejor forma de seguir adelante. Después, cada territorio ha ido desarrollando su tradición culinaria y se ha adaptado a los nuevos tiempos. Si un producto –y su forma de elaborarlo- ha ido pasando de generación en generación en Formentera es el ‘peix sec’ (pescado seco).

 

Este producto, que es básicamente se trata de raya secada al sol sobre las sabinas después de haberlas sumergido en sal morra, fue de gran ayuda para los pescadores de la pitiusa sur antes de la llegada del turismo. Esta forma de prepararlo permitía conservar las capturas durante más tiempo y adaptar su consumo durante todos los meses del año, lo que era de gran importancia cuando la comida era un bien muy preciado y escaso. Se convirtió, además, en el toque diferencial de la ensalada payesa, ya que su sabor aporta un toque diferencial a las hortalizas que surgen de la tierra formenterense.

El ‘peix sec’, que ha sido incluido dentro del proyecto Arca del Gusto, es muy atractivo para todos los visitantes de Formentera por su sabor y textura, aunque es una forma de trabajar el pescado parecida a la de otras zonas del Mediterráneo. Para conseguirlo se utilizan siempre las capturas más grandes de ‘rajada’, un animal que los pescadores atrapan con métodos menores tradicionales, como la red o el palangre, a bordo de los ‘llaüt’, unas embarcaciones tradicionales de madera de Baleares. Cabe destacar que estos barcos en su inicio eran de vela, aunque con el paso del tiempo se fueron adaptando nuevas versiones a motor. Los primeros constructores son conocidos como ‘mestres d’aixa’, de los que quedan muy pocos tanto en Ibiza como en Formentera.